28.2.11

“Estaba constantemente cachondo y me masturbaba continuamente. Le hacía el amor a Lydia y luego por la mañana volvía mi casa y me masturbaba. El pensamiento del sexo como algo prohibido me excitaba más allá de toda razón. Era como un animal aplastando a otro hasta la sumisión. Cuando me corría sentía como si fuera en la cara de todo lo decente, blanca esperma resbalando por las cabezas y almas de mis padres muertos. Si hubiera nacido mujer seguro que hubiera sido prostituta. Como había nacido hombre, anhelaba constantemente mujeres, cuanto más guarras mejor. Y sin embargo las mujeres, las buenas mujeres, me daban miedo porque a veces querían tu alma, y lo poco que quedaba de la mía, quería conservarlo para mí. Básicamente deseaba prostitutas porque eran duras, sin esperanzas, y no pedían nada personal. Nada se perdía cuando ellas se iban. Pero al mismo tiempo soñaba con una mujer buena y cariñosa, a pesar de lo que me pudiera costar. De cualquier manera estaba perdido. Un hombre fuerte pasaría de ambos tipos. Yo no era un hombre fuerte. Así que continuaba bregando con las mujeres, con la idea de las mujeres.”

Charles Bukowski
Extracto de Women (1978)

27.2.11

Las finanzas deben estar al servicio de la comunidad

Las finanzas deben estar al servicio de la comunidad. Los plutócratas no deben formar un Estado dentro del Estado. En el área de la política social nuestro principio debe ser: el bien general es la ley suprema.

Debemos juzgar a una economía desde el punto de vista del provecho que en la práctica proporciona al pueblo y no partiendo de una teoría. Así, si alguien nos dice: Miren, tengo una teoría económica maravillosa, debemos responderle: ¿Qué provecho se le puede sacar? Esto es lo decisivo. La teoría no debe interesar en modo alguno, nos debe interesar únicamente el provecho, pues las personas no están al servicio de la economía, sino la economía al servicio de las personas.

Los créditos, además de que significan una carga de intereses, implican depender políticamente de fuerzas extrañas a la nación. Los intereses devoran la capacidad de ahorro de un pueblo.

23.2.11

(...) Idea de tahur la del ex ministro Benítez sobre el impuesto fructuario al juego. Otros gobernantes han hecho de sus países verdaderos garitos donde se roba, se hacen trampas, se asesinan, como tahúres.

Aquí en el Paraguay no vencieron ellos. Los vencí yo. Destruí sus ventajas de tahúres clandestinos por la contraventaja de saber que son miserables tahúres. Conozco la marca de cada naipe que juegan. Sé de qué libros han sido arrancados. Oigo el galope del caballo de copas. Tengo en mis manos los cuatro ases: El de basto en mis manos, garrote de mi poder. El de oro en las arcas del Estado. El de copas en que darles de beber la hiel y el vinagre a los traidores. El de espadas para podarles la cabeza. este es mi juego de truco. En él yo banco el triunfo a sangre fría, sin trucos de ninguna especie.(...)

Yo el supremo
Augusto Roa Bastos